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domingo, 30 de septiembre de 2012

Made in Chile #8: Fiestas Patrias


            Septiembre es un mes importante para Chile. Si el día 11 se trata de un día que muchos prefieren no recordar, tal y como se vio en la anterior entrega, la semana siguiente entera es motivo de fiesta y celebración en este país, pues se celebran las denominadas Fiestas Patrias. Se trata de todo un evento social y comercial a la altura de la propia Navidad, ya que en los días anteriores es muy fácil escuchar decir “feliz dieciocho” en cualquier parte.

            Las Fiestas Patrias se centran en dos días, el 18 y 19 de septiembre, pero es el primero de ellos el que lleva el peso histórico y cultural. El 18 de septiembre de 1810 se celebró la primera Junta Nacional de Gobierno, en un proceso de formación del Estado de Chile. Sin embargo, no hay que confundir esta fecha con la del 12 de febrero de 1818, fecha en la que se proclamó oficialmente la independencia. El día 19 se celebra el día de las Glorias del Ejército, cuando se efectúa el desfile militar. Por tanto, pese a que en un principio (las Fiestas Patrias se vienen celebrando desde 1811) las festividades se alargaban durante semanas, se establecieron dos días festivos para las conmemoraciones.

            Además de decorar todo con miles de banderitas nacionales (en la ventana, en el balcón, en los espejos del coche, en las calles), los chilenos aprovechan estas festividades para acercarse, aunque sea por unos días, al folklore nacional. Son muy comunes las fondas, unos centros de entretenimiento instalados por lo general en parques municipales donde se baila (cueca, sobre todo), se come (empanadas, brochetas de carne, mote con huesillos…), se canta, se compra artesanía, se ve el rodeo y se disfruta del alegre y bullicioso ambiente. Y si no van a una fonda, los chilenos se decantan por un rico asadito en la parrilla de casa, en compañía de la familia y de unas cuantas rondas de pisco o lo que se cruce por el camino.

            Aunque sea un sentimiento patriótico algo efímero, es una fiesta popular y muy animada que puede aprovecharse para aprender más sobre los orígenes de este país y sobre unas costumbres que, al igual que en la mayoría de países desarrollados, quedan relegadas al mundo rural, e incluso esto ha empezado a perderse. Por esa razón, encuentro divertido disfrutar de estos dos días en compañía de familiares y amigos, siempre dispuesto a engullir toneladas de comida y de hacerla bajar con cuanta bebida sea capaz de soportar el cuerpo. Incluso los profesores de la universidad te preguntarán eso de “¿tomaron ustedes mucho?”, asumiendo que son días de puro escape y diversión. 


Haciendo volar volantines (Parque Intercomunal)


Rodeo (Parque Intercomunal)


Exhibición de cueca, baile nacional de Chile (Parque Intercomunal)

Fuente de las imágenes: elaboración propia

martes, 18 de septiembre de 2012

Made in Chile #7: 11 de septiembre

No es fácil hablar sobre este tema, principalmente porque implica indagar en un pasado que quizás no es del todo lejano y que, por esa misma razón, está en la memoria de muchos chilenos intentando permanecer oculto, sin muchas ganas de salir a flote. Así pues, intentaré ser lo más objetivo posible. 

El 11 de septiembre ya era famoso antes del 2001, al menos en Chile, ya que ese mismo día del año 1973 el general Augusto Pinochet dio un golpe de estado que acabó con la que, hasta ese momento, había sido una de las democracias más sólidas y estables de América Latina. Aquel día, los tanques del ejército rodearon el palacio de La Moneda, el mismo que más tarde fue bombardeado desde el aire. Se dice que Salvador Allende, presidente de la república desde 1970 famoso por el ambicioso sueño socialista que intentó hacer realidad, se suicidó dentro del palacio. Lo que sí está claro es que aquel acto marcó el fin de una era representada por la democracia, dando paso a una dictadura que se alargó durante diecisiete años, marcada entre otras cosas por violaciones a los derechos humanos, torturas, desapariciones, suspensión de libertades individuales y suspensión de partidos políticos, así como la instauración de una serie de políticas neoliberales surgidas directamente de los llamados Chicago Boys, que instauraron un tipo de capitalismo que reinó en occidente a partir de la denominada crisis del petróleo de 1973. 

39 años después, Chile es un país que lleva más de veinte en un período de nueva democracia. La izquierda gobernó durante veinte años en esta nueva era, mientras que la derecha, de la mano de Sebastián Piñera, está al frente del país desde 2010. Veintidós años de democracia no han sido suficientes para ejecutar cambios que pide la población, ya que la herencia de la dictadura aún es visible en realidades como la salud, la educación y las pensiones, donde predomina el sistema privado y el público presenta, por desgracia, serias deficiencias 

Hay algo claro: todo apunta a que algo se cuece, y la forma más clara de verlo es en las protestas estudiantiles que han llevado a Chile a primera plana varias veces durante este último año, los que apuestan por una educación pública y gratuita. En un país que no deja de crecer económicamente y que, al menos de momento, no ha sido arrollado por la crisis económica mundial, el gobierno tiene hartas y difíciles tareas a las que hacer frente de puertas para adentro. 


Fuente de la imagen: elpatagonico.cl

sábado, 1 de septiembre de 2012

Made in Chile #6: la mano y el beso

Después de haber conocido varios países, y por ende varias culturas, no deja de sorprenderme cómo una costumbre relativamente sencilla como un saludo o una despedida puede variar tanto de un país a otro. Muy cercano tienes que ser en algunos países como Alemania, Estados Unidos o el Reino Unido para saludar a alguien con un beso, en estos países tienes que conformarte con estirar la mano y que ya sea chico o chica te la apriete. En la Europa mediterránea somos mucho más cálidos, de eso no hay duda. Lo de plantar dar la mano o dar dos besos en la mejilla es algo que casi hacemos por inercia. Sin embargo, si en Chile va algo más allá.

Para empezar, recuerda que en Chile no se dan dos besos, sino uno. Pero esto no quiere decir que vayas a recibir menos besos, ni mucho menos. Y lo mismo ocurre con darse la mano, pero queda reservado a los hombres, al contrario que en países europeos como los que antes mencionaba donde uno tiene la sensación de estar reuniéndose con ejecutivos todo el rato.

En Chile, y voy a utilizar un ejemplo cercano como son mis actuales compañeros de clase, no es necesario que hayan pasado dos meses de verano sin verse para saludarse con dos besos. De hecho, basta con que hayan transcurrido 24 horas. Así que por mucha sangre latina que corra por mis venas, no deja de sorprenderme que todo el mundo se salude con besos y con la mano a diario, por la sencilla razón de que no me había tocado verlo hasta ahora. Al menos en mi tierra, solo he visto actuar así a mis compañeros a la vuelta de unas largas vacaciones y el día de cumpleaños de alguien, pero eso sería todo. Y desde luego, lo último que voy a hacer es escandalizarme (no hay que olvidarse que en algunos países, dar un beso en la mejilla a una mujer no está del todo bien visto), porque creo que, antes que soportar caras largas y murmullos inaudibles de saludos desganados, no hay mejor forma de empezar una mañana que saludando así. 

Sólo espero que a la vuelta no me tomen por moscardón pesado...